La lluvia limpia y hace que se vean las estrellas en este cielo gris que cubre la ciudad.
Nevará sobre mi cuerpo y mi sangre se helará.
El agua cristalizará, moriré con diamantes al caer la noche.
La noria seguirá girando, sola, vacía, bajo las estrellas que la observaron dieciocho inviernos.
Alma cansada.
30.12.09
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